Críticas a las obras en el paseo Rosales

El movimiento vecinal considera que la modificación del tamaño de las aceras repercutirá en la anchura de la calzada, que se verá reducida, lo que dificultará el tránsito de vehículos de gran tamaño como camiones o autobuses. Los miembros de este colectivo plantearon este asunto al alcalde, Juan Carlos Bustos, en un pleno y desde el Ejecutivo local han asegurado que los trabajos cuentan con todos los permisos necesarios de la Comunidad de Madrid. “Nos han dicho que tienen la autorización de los técnicos regionales, pero pueden hacer algo contrario a la seguridad por muy técnicos de la Comunidad que sean, pero habrá que esperar a que esté terminado porque tampoco dan muchas explicaciones sobre cuántos metros va a tener y cómo va a quedar definitivamente la calzada”, explica José Pedro García, portavoz de la asociación.