Aguirre recibe como un “grandísimo honor” el título de hija adoptiva
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
“Para mí es un grandísimo honor que el Ayuntamiento de El Escorial me haya nombrado hija adoptiva. Yo no nací aquí, pero me casé en la iglesia de San Bernabé y pasé los veranos de mi infancia, juventud y adolescencia. La infancia de mis hijos la he vivido también en esta localidad”, recordó Esperanza Aguirre tras recibir el reconocimiento del Ayuntamiento, en un agradecimiento que se convirtió a un tiempo en respuesta a los grupos (Izquierda Unida y Acción Plural) que los días previos habían anunciado su intención de no acudir al pleno de honores y distinciones, rechazando la concesión del citado reconocimiento a la presidenta regional, de la que dijeron -a través de un comunicado y también de unas octavillas que repartieron la víspera- que no tenía ninguna vinculación con El Escorial. Aguirre, además, recordó que durante su etapa como ministra de Educación se construyeron en el municipio el instituto y una escuela infantil.
Un privilegio
“Es un privilegio”, continuó, “haber compartido este nombramiento con los herederos de Matías López, que fue una fábrica de chocolates que se instituyó aquí en el siglo XIX con unas enormes inversiones que dieron trabajo a prácticamente todos los vecinos, que hizo que creciera la población y que hoy el tataranieto del fundador, que se vino desde Galicia a Madrid en burro, piensa volver a abrir. También he compartido la distinción con un oficial de Policía, otros funcionarios y con la viuda de un ex concejal socialista con gran arraigo, así como con un club de atletismo y uno danza. A todos mi gratitud por lo que han hecho por El Escorial”, señaló Aguirre, que a su llegada fue recibida por un pequeño grupo de manifestantes -unas 20 personas- que protestaban contra los nuevos ajustes y recortes del Gobierno regional.
El resto de reconocimientos en el pleno celebrado el lunes fueron los siguientes: hijo predilecto a título póstumo, José García González, concejal entre 1979 y 1987 y presidente de la Asociación de la Tercera de Edad de El Escorial de 1998 a 2003; Medalla de la Leal Villa en su categoría de Oro al Club de Amigos Los Chachipés; Medalla de la Leal Villa en su categoría de Plata al Club de Atletismo Las Ardillas y a la Familia Matías López, fundadora y propietaria de la histórica Fábrica de Chocolates.
Igualmente, se reconoció a distintos trabajadores en su año de jubilación -Guillermo Benito, Pedro San Segundo y Ricardo Arenas Froilán-, así como a Jaime García Rodríguez por sus 25 años de servicio en la Policía Municipal.