“Nos trataron como si fuéramos ciudadanas de tercera y se negaron a empadronar a mis hijas en Moralzarzal”

Al parecer, también para un ciudadano español tramitar el alta de empadronamiento en el Ayuntamiento de Moralzarzal puede resultar complicado y molesto. Así, cuando en otras localidades de la Sierra este trámite resulta bastante sencillo (presentación del DNI actualizado y de un recibo de la luz o del teléfono a su nombre), en este municipio el departamento de Gestión Padronal parece dispuesto a poner no pocos inconvenientes a los ciudadanos que deciden ejercer su derecho a inscribirse en el padrón, o al menos eso es lo que se desprende de la denuncia que les reproducimos hoy en nuestro periódico, cuyo contenido es el siguente:
“El sábado, 14 de abril, a última hora de la mañana, acompañada de mis hijas acudí al Ayuntamiento de Morazarzal, localidad donde llevo viviendo más de medio año, para empadronarnos. La experiencia fue muy desagradable dado el incomprensible comportamiento mostrado por las dos empleadas municipales que nos atendieron y que a petición mía se identificaron como Belén Trejo Argudo y Carmen Eguiluz Sánchez. Desde el principio comprobé el trato grosero con que trataban a otros vecinos que estaban siendo atendidos antes que nosotras y cómo a uno de ellos cuando les estaba explicando el motivo que le había llevado al Ayuntamiento una de la citadas funcionarias le dijo despectivamente “no me lea lo que pone ese documento que me lo sé muy bien”, dejando al hombre con la palabra en la boca. Más tarde nos tocaría el turno a nosotras. Nuestra intención era trasladar el empadronamiento de Collado Villalba a Moralzarzal, donde ahora residimos, y tras pedir hace más de un mes información sobre los requisitos que eran necesarios al efecto, les presentamos nuestros DNI, Libro de Familia (que ellas nos exigieron ante nuestra sorpresa, puesto que las tres éramos mayores de edad), la hoja de inscripción padronal correspondiente y el original del contrato de alquiler de nuestra vivienda. Tras revisar y fotocopiar (¿?) todos estos documentos, una de las empleadas antes mencionadas me comunicó que sólo podría proceder a empadronarme a mí y no a mis dos hijas, porque al ser estas mayores de edad y no aparecer sus nombres en el contrato de alquiler de la vivienda, necesitaba que el propietario de la misma compareciese presencialmente en el Ayuntamiento para certificar su residencia en la misma. Les intenté explicar que era muy difícil que el dueño de la casa (en este caso se trata de una empresa que está regida por un consejo de administración) viniera a Moralzarzal a hacer dicho trámite y su respuesta fue: ¡Me da igual: o comparace o no se puede realizar el empadronamiento! Dado el cariz que tomaba el asunto y la prepotencia mostrada por las empleadas municipales, que incluso llegaron a amenazarnos con un “en esos términos no tenemos nada más que hablar con usted”, a la vez que nos mostraban una hoja de reclamaciones por si queríamos utilizarla y sin que siquiera nos hubiesen devuelto los impresos presentados, decidimos marcharnos y no empadronarnos en un pueblo que nos gusta, que es acogedor, que goza de una magnífica calidad de vida, pero que mucho me temo no está, al menos en este área, debidamente representado por unas trabajadoras cuyo trato y educación deja bastante que desear. Nuestra decisión, tras ser tratadas como ciudadanas de tercera, es renunciar al derecho a empadronarnos, algo que posiblemente terminará perjudicando más al Ayuntamiento que a nosotras. Un saludo. A. M. A.”.

Facilitar el empadronamiento
La mayoría de los consistorios de la Sierra del Guadarrama, tal como indicábamos al principio, no suelen poner impedimientos a la hora de facilitar el empadronamiento de los ciudadanos de nacionalidad española en sus respectivos municipios.Tanto es así que, incluso, algunos para agilizar los trámites aceptan como justificación de residencia el recibo de la luz o del teléfono. También en varios distritos de la capital sucede lo mismo. Los inmigrantes lo tienen bastante más complicado, al tener que aportar una documentación mucho más compleja. No obstante, si usted contacta con la página web del Ayuntamiento de Moralzarzal y pincha “Servicio de Atención al Ciudadano, Gestión Padronal”, comprobará que, al menos a simple vista, los requisitos exigidos para consumar el empadronamiento son los habituales, es decir, presentar la instancia normalizada de la solicitud cumplimentada; la hoja padronal cumplimentada y firmada por todos los incritos mayores de edad; documento que acredite la identidad de las personas (DNI, Pasaporte, Libro de Familia para menores de 15 años...) y documento que certifique la ocupación de la vivienda bien a través de la escritura de propiedad, contrato de compra-venta o contrato de alquiler con el visto bueno en su caso del propietario y/o arrendatario. Es en este último punto donde las empleadas del servicio de gestión padronal del Ayuntamiento y algunos peticionarios discrepan, sobre todo por las dificultades y molestias que puede ocasionarles el hecho de que tenga que ser el propietario de la vivienda quien tenga que acudir a las dependencias municipales para acreditar la veracidad del contrato de alquiler que ellos han aportado previamente. Dado que muchos arrendatarios viven en otras provincias españolas, incluso en el extanjero, este condicionante puede impedir a los ciudadanos ejercer sus derechos constitucionales. Hace dos o tres años un matrimonio denunció un caso similar en nuestro periódico porque pese a vivir en régimen de alquiler en un chalet de esta localidad desde hacia bastante tiempo, no pudo empadronar a sus padres políticos porque el Ayuntamiento les había pedido la presencia de la propietaria del inmuble para acreditar su residencia y esta llevaba ya varios años viviendo en Argentina.

El alcalde se disculpa
Ante la imposibildiad de poder hablar con Mª Ángeles Jiménez, edil responsable de la Concejalía de Recursos Humanos y Atención al Ciudadano, contactamos con el alcalde, José María Moreno, para que nos diera su versión sobre lo acontecido. Tras conocer el contenido de la denuncia, dijo: “Dudo que las funcionarias responsables de tramitar las altas en el Padrón municipal hayan dispensando un trato grosero a esta o a ninguna otra persona , pero intentaré enterarme del asunto y si tenemos que pedir disculpas lo haremos. Respecto al tema de los empadronamientos quiero manifestar que tras los numerosos casos de abuso ocurridos, donde hemos comprobado el empadronamiento incluso de más de 20 personas en un mismo piso, decidimos poner filtros para impedirlo. Reconozco que nuestras exigencias chocan con la normativa establecida al respecto por el Instituto Nacional de Estadística, que exige para acreditar la residencia de un ciudadado, entre otros documentos, la escritura de propiedad de la vivienda o el original del contrato de alquiler. Nosotros ahora pedimos que se persone en el Ayuntamiento el propietario del piso y confirme el número de residentes para poder frenar estos abusos. No obstante, si el peticionario del empradonamiento se considera perjudicado, procederemos a darle de alta”.