La aparición de una segunda factura del hotel de Andorra a nombre de IGS abre nuevas incógnitas sobre el ‘Caso Villalba’

“José Pablo González y el resto de invitados pasaron ocho días y siete noches en el establecimiento, desde el 27 de diciembre de 2006 hasta el 3 de enero de 2007. La estancia de todo el grupo (formado por 14 personas) costó 21.217,51 euros y fue abonada por el empresario, a través de IGS Villalba, de la que es administrador solidario. El ex regidor socialista tenía a su disposición dos habitaciones dobles estandar para su mujer y los dos hijos de la pareja. Cuando ABC destapó el caso, González aseguró en el pleno municipal haber pagado la estancia de su familia en el hotel del Principado. Es más, exhibió la copia de una factura -no quiso entregarla para que no constara en acta- que apuntaba que las siete noches en el alojamiento de lujo de Andorra -en plena temporada alta y con dos habitaciones a su nombre- le había costado 1.751 euros. Nada que ver. Tras analizar la factura real, puede decirse que el entonces alcalde mintió en sesión plenaria a su propio partido, al resto de grupos de la oposición y, también, a los vecinos del municipio, cuando aseguró que nadie le había invitado al viaje...”.

También el rotativo madrileño, bajo el subtítulo ‘Relaciones sospechosas’, añadía: “Los vecinos del municipio siempre desconfiaron de las relaciones entre el constructor Gómez Paredes y el ex alcalde socialista, Las sospechas aumentaron tras publicar ABC las fotografías que demostraron que pasaron juntos la Nochevieja de 2006 en Andorra tras la adjudicación del túnel y, además, tras conocerse que ambos comparten el mismo asesor fiscal para sus diferentes empresas. Se llama José Sevilla García Prieto y tiene su despacho en el Edificio Ronda situado en la Ronda de Atocha. La constructora Cover (propiedad de Gómez Paredes) que junto a Ortiz formó la UTE que construyó el túnel de Honorio Lozano, ha resultado adjudicataria de numerosas obras en Collado Villalba...”.

Factura llena de irregularidades
Con el único interés de averiguar la legalidad o ilegalidad de las facturas presuntamente emitidas por el Hotel Grau Roig de Andorra, El Faro del Guadarrama reproduce hoy (página de la izquierda) tanto la presentada por el ex alcalde socialista, José Pablo González, en el pleno celebrado el 27 de enero de 2011, por importe de 1.751,36 euros, que el regidor afirmaba haber pagado con su tarjeta Visa y la que ahora acaba de publicar ABC por importe de 21.217,51 euros. Entre ambas hay sustanciales diferencias. Así,bajo el título “Una factura con dos trucos”, el citado periódico puntualiza: “La factura real que se hizo tras abonar la cuenta del hotel de Andorra, que ha tenido acceso ABC, presenta dos ‘pequeñas triquiñuelas’ para que esta pudiera desgravar a Hacienda. Según ha podido saber este periódico, los responsables de IGS Villalba solicitaron al establecimiento que en la ‘descripción’ del recibo dejara claro que se trataba de la celebración de un ‘seminario’ y no de unas vacaciones ociosas. Además, pidió al hotel que modificara las fechas de entrada y salida para que la factura pudiera desgravarse íntegramente en la presentación del IVA del año 2006. El empresario además tuvo que adelantar 5.769 euros dos meses antes de Nochevieja”.

Pues bien, aparte de las citadas triquiñuelas o trucos que, supuestamente, tenían como objetivo que la mercantil IGS Villalba pudiera tributar menos a la hacienda pública, y observando el contenido de ambas facturas, no resulta difícil descubrir las siguientes irregularidades o diferencias: la factura presentada por José Pablo González y que corresponde a su estancia en la habitación 304 está expedida el 3 de enero de 2007, fecha que también coincide con la finalización de la estancia del regidor villalbino en dicho establecimiento hotelero (27-12-2006 al 3-01-2007), y lleva como número de registro el 019522. Por el contrario, la factura que publica ABC recoge la ocupación de las habitaciones 210-403-401-202-114 y 112, sin citar la 304, que según el anterior documento había ocupado la familia González Durán; otro dato no menos curioso es el número de registro de la misma (11449/01) y la fecha de expedición (4 de diciembre de 2006), lo que supondría la emisión de unas 8.000 facturas por parte del Hotel Grau Roig en apenas un mes. Pero el cúmulo de los despropósitos está en las fechas de entrada y salida de los presuntos invitados de IGS Villalba, empresa por entonces domiciliada en la Plaza del Caño, 3 de Alpedrete, pues según consta en dicho documento fue la que asumió los gastos de estancia en el establecimiento andorrano. Este recibo recoge que la fecha de llegada al hotel fue el 11 de diciembre de 2006 y lo abandonaron el 15 de diciembre de 2007. Es decir, que el supuesto ‘seminario’ duró más de un año, algo que pondría en solfa la veracidad de la cifra facturada.

También la factura presentada por el ex alcalde socialista levantó muchas sospechas, sobre todo al no coincidir el importe total de la misma con las tarifas que por entonces estaban en vigor en dicho hotel, y así lo denunció el por entonces portavoz del grupo municipal del PP, Agustín Juárez, con la siguiente operación matemática: 6 noches x 187,30 euros (habitación estandar) x 2 personas = 2.247,60 euros, añadiendo a dicha cantidad los 400 euros del cotillón obligatorio de fin de año. Por tanto la factura no podría ser inferior a 2.647,60 euros y la que González mostró y que hoy reproducimos sólo ascendía a 1.7512,36.

Volviendo a la factura de IGS Villalba que, según ABC, corresponde a la estancia del alcalde y los dos constructores villalbinos, junto a sus familias, en el hotel del Principado, como habrán podido comprobar, presenta numerosas incongruencias, de ahí que ello nos obligue a preguntarnos: ¿Por qué los responsables de este hotel confeccionaron supuestamente una factura con tantas irregularidades y contradicciones como las que hemos detallado anteriormente? ¿Se elaboró este documento antes o después de salir a la luz pública el ‘Caso Villalba’? ¿Quién filtró dicha factura a ABC? ¿Qué objetivo tenía ahora sacar a la luz pública este documento? ¿Comparten Gómez Paredes y José Pablo González los servicios del mismo asesor fiscal? ¿Estamos ante un ajuste de cuentas entre los constructores que han protagonizado el ‘Caso Villalba’ y el ex regidor?
Desde luego las relaciones entre los empresarios citados y González no deben pasar por su mejor momento, sobre todo si nos atenemos a las críticas vertidas en los últimos meses contra el ex alcalde en El Telégrafo, un medio que durante muchos años, concretamente hasta su derrota en los comicios de mayo, había sido su periódico de cabecera.