El candidato del PP pide a los vecinos que apuesten sobre seguro y califica como “personalista” la gestión de Pérez del Molino

“Es una nueva etapa que afronto con muchas ganas e ilusión, y sobre todo con la intención de trabajar por los vecinos de Guadarrama”, manifestó a modo de presentación el también edil de Urbanismo. En cuanto a la división existente (“nuevas circunstancias un poco atípica”, señaló), Rodríguez Bonilla lamentó que se haya producido esta situación, “pero ella [en referencia a Carmen María Pérez del Molino y líder de la Agrupación Popular por Guadarrama, APPG] ha querido elegir ese camino y ya veremos lo que ocurre. Tengo claro que el PP es el partido más importante de España y los vecinos lo sabrán valorar. Esto nos va a repercutir poco”, aseguró.

También salió al paso de las declaraciones de la alcaldesa, indicando que “el PP no ha apartado a nadie”. De hecho, prosiguió, ni la regidora ni los concejales que le acompañan en esta nueva formación han sido expulsados aún del partido, añadiendo que esa decisión es competencia del Comité de Garantías del Partido Popular. “Se han autoexcluido, así de claro”, subrayó, asegurando a renglón seguido que el PP guadarrameño, a través de su Comité Ejecutivo, “decidió que Carmen María Pérez del Molino no fuera la próxima candidata. Y estamos hablando de una Ejecutiva formada por 30 personas y no por una sola como se está dando a entender, personalizando este tema en la figura de José Ignacio Fernández Rubio”, manifestó Rodríguez Bonilla, quien recordó que su candidatura obtuvo el apoyo del 70 por ciento de este Comité Ejecutivo.

Acompañado en esta comparecencia por los tres ediles del Equipo de Gobierno que se han mantenido fieles a la línea oficialista (María Rodríguez, Enrique Herranz y Francisco Javier Martínez), el candidato popular hizo una primera declaración de intenciones: “Nos presentamos bajo unas siglas inmejorables y trataremos de hacerlo lo mejor posible”. Como líneas básicas de su programa, apuntó a la “austeridad, pero sin dejar de lado los servicios que se prestan a nuestros vecinos”, así como a la necesidad de crear empleo. También mostró su intención de “revisar la presión fiscal para rebajarla en la medida de lo posible”.

Tensión y responsabilidad
Volviendo a la complicada situación que se vive en el Ejecutivo tras este enfrentamiento, Rodríguez Bonilla reconoció que el ambiente en el Ayuntamiento es “tenso, pero sin dejación de responsabilidades por ninguna de las partes”. En todo caso, añadió, el origen de la crisis se remonta “casi al inicio de la legislatura”, agravándose a partir del momento en que José Ignacio Fernández Rubio es nombrado viceconsejero de Empleo y Mujer de la Comunidad de Madrid, lo que precipita los acontecimientos. En principio, su sustituto como alcalde debería haber sido el propio Miguel Rodríguez Bonilla, si bien éste decidió rechazar el cargo por “motivos profesionales”. De este modo, Carmen María Pérez del Molino se convirtió a principios de agosto de 2008 en la primera alcaldesa de la historia de Guadarrama. Lo que no dijo entonces el ahora candidato del PP y sí reveló el lunes en su comparecencia ante los medios es que había una segunda razón: Me di cuenta de que no contaba con el apoyo de todo el Equipo de Gobierno, y por desgracia el tiempo me ha dado la razón”. De este modo, decidió que la Alcaldía pasara de largo. “Fue una cuestión de responsabilidad. Temía que de otra forma el Ayuntamiento fuera ingobernable”. La pregunta, una vez conocida esta circunstancia, estaba clara: ¿Tenía ya entonces Miguel Rodríguez Bonilla la intención de presentarse luego como cabeza de lista del PP en mayo de 2011? Y la respuesta la dio el propio edil: “No. Daba por hecho que Carmen María Pérez del Molino seguiría siendo la candidata, siempre que contara con la confianza del partido”.

La polémica del convenio
En cuanto al polémico convenio urbanístico que, según la alcaldesa, está en el origen del enfrentamiento, negó la existencia de discrepancias. “El problema ha surgido con el vecino con el que se había suscrito el acuerdo, que interpretó que ese convenio no tenía que haberse dejado morir, lo que ha dado lugar a una denuncia”. Rodríguez Bonilla también indicó que él no hubiese seguido el camino emprendido por la regidora en este caso. “Estoy convencido de que era bueno para el Ayuntamiento, para los vecinos y también para el propietario, aunque es verdad que ahora las circunstancias han cambiado”. Igualmente, mostró su intención de retomar este tema en caso de acceder a la Alcaldía, de modo que se reactive la operación urbanístico-comercial en la parcela de la calle La Sierra. En este sentido, indicó que la tramitación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) sigue su curso. “Espero que se pueda aprobar en el principio de la próxima legislatura”, manifestó, añadiendo que su puesta en marcha permitiría la construcción de infraestructuras como la estación de autobuses, en la zona norte, o la plaza de toros multiusos, con área comercial, en el solar que ocupa el aparcamiento de La Sierra.

A continuación, dedicó la siguiente parte de su intervención a cuestionar las formas de su todavía compañera en el Ejecutivo: “Ha sido un gobierno absolutamente personalista, y a las pruebas me remito. Este pasado fin de semana han estado repartiendo propaganda y se atribuye como suyos los logros del PP en los últimos cuatro años”, haciendo referencia a temas como el convenio con el Canal de Isabel II o el recién inaugurado parking subterráneo. “El partido no somos los 11 concejales del Ayuntamiento, sino mucha gente que está detrás. Nos hemos encontrado con muchas dificultades para hacer nuestro trabajo”, remarcó.
¿Fuga de votos?
Finalmente, y en cuanto a la posibilidad de haber integrado en su candidatura a alguno de los concejales que acompañan a Pérez del Molino en APPG, Rodríguez Bonilla señaló que es algo que contempló “desde el primer minuto, pero a día de hoy esa posibilidad no existe”. Sí estarán, avanzó, los tres ediles que le acompañaron en la rueda de prensa. “La lista está prácticamente cerrada, pero no sería prudente dar los nombres en este momento”, afirmó el candidato, para acabar diciendo que no temen la posible pérdida de votos tras esta división: “Creo que eso no va a ocurrir porque el PP es un partido fuerte. No nos da ningún miedo, aunque sí nos deja mal sabor de boca el hecho que por una rabieta se haya formado esta Agrupación. Guadarrama lleva muchos años avanzando de la mano de políticas populares, y no es el momento de que los vecinos se la jueguen, sino de apostar seguro”.