Barceló, uno de los implicados en los contratos de ‘Galapajazz 2008’

Barceló fue uno de los componentes de la Junta de Gobierno que votó a favor del contrato de Galapajazz 2008, pese al informe desfavorables del interventor y el secretario municipal. Con su aprobación, indican desde el Partido Popular, el contrato salió adelante “sin los correspondientes pliegos administrativos, con cláusulas abusivas e ignorando la prelación de pagos, y ahora tendrá que verse las caras con la justicia para explicar esta actuación”.

El PP añade a esto que Barceló “suma esta supuesta ilegalidad a una interminable lista de irregularidades en facturas municipales que alcanzan los 92.000 euros. Facturas todos ellas comprometidas sin crédito presupuestario o, en otros casos, con infracción de la normativa presupuestaria y contractual, como se expone en diversos informes de la intervención municipal”. Los ejemplos, añaden los populares, “son especialmente sangrantes, como es el caso de la friolera cifra de más de 60.000 euros que Barceló gastó en una campaña navideña, donde se advierte en los informes de la Intervención que se produce un fraccionamiento de los contratos”. 10 millones de las antiguas pesetas para las navidades del año 2007-2008, distribuidos, indican desde el PP, en diseño, realización y colocación de adornos, retirada de los mismos, alquiler de casetas para mercadillo y vigilancia. “Y todo ello poco meses antes de la anunciada quiebra por parte de la entonces alcaldesa de Galapagar, Carmen Toledano, y de la temida advertencia de los sindicatos sobre el peligro de las nóminas de los trabajadores”, subrayan los populares.

El PP recuerda que en el currículum del candidato de la Liga Reformista (ahora edil de Foro Verde-GyU) hay otros “escandalosos ejemplos, como la factura de 11.000 euros por una guía sobre patrimonio ambiental que ningún trabajador municipal ha visto nunca, una entrevista concertada por valor de 1.800 euros o diversas comidas en un restaurante local que ascienden a 662 euros. Sin olvidar el caso Jafarinas, en el que Barceló fue imputado por un supuesto delito de estafa y fraude pero del que se vio librado tras un sospechoso pacto de gobierno con el PSOE, que retiró la querella con un dictamen externo y amigo que costó al Ayuntamiento 7.500 euros”.

Ahora, prosiguen desde el PP, “es el vecino de Galapagar quien debe sacar sus propias conclusiones y preguntarse sobre la existencia de una guía patrimonial que jamás ha visto la luz, por esas valiosa entrevista concedida a cambio de una astronómica cifra, mientras declaraba junto a su socia, Carmen Toledano, la quiebra municipal, o cuestionar un claro ejemplo de fraccionamiento de contratos, con precios poco acordes a los valores del mercado, con la excusa de decorar el pueblo durante la Navidad”.
“Una vez más, bajo unas siglas de tipología aparentemente renovada y pseudomoderna, quiere disfrazar su pasado y esconder su habitual falta de ética y lanzarse a la campaña electoral. Los vecinos deben saber qué la Liga Reformista. Es más de lo de siempre y todo lo que estos partidos independientes conllevan para Galapagar: caos, división, desgobierno, inestabilidad e intereses personales”, concluye el PP.