La mala gestión del concejal Gómez Sierra

Se van a cargar La Chopera con el hospital; se construyó una biblioteca con miles de defectos, como es la ausencia de calefacción en invierno, climatización en verano, falta de seguridad en los accesos al parking y excesos de ruidos que impide la lectura y el estudio a sus usuarios, etc., etc. Y como guinda a todos estos despropósitos urbanísticos, la construcción del inútil eje de Batalla de Bailén-Honorio Lozano, con parking y túnel incluidos, que además de quebrantar la salud de los vecinos durante casi tres años, los que han durado las obras, han enterrado ahí 40 millones de euros, más los intereses que genere la deuda en el futuro, cantidad que no está cuantificada. A eso añádanle los 500 árboles que arrancaron y cuya sombra nunca volveremos a disfrutar.

Y en esta legislatura el señor Gómez Sierra es concejal de Hacienda, y claro, así está la hacienda municipal. Sí, es verdad que hay presupuesto, pero no tiene tesorería y no paga, y como no puede hacer declaración extrajudicial de crédito, porque no hay tesorería, pues tampoco paga. Como, además, el Ayuntamiento consume y consume, aunque no es una pila Duracell, y no paga a nadie, cada día está más endeudado, pero esto no impide que se celebren fiestas, corridas de toros, conciertos festivaleros, fuegos artificiales y demás saraos, que para eso sí hay dinero. Y los proveedores no cobran, los servicios sociales se recortan cada día más y a los trabajadores municipales tampoco le pagan lo que les adeudan por la actualización del precio de las horas extras.

Lo dicho: el señor Gómez Sierra, que se vaya a su casa, a ver si allí hace algo de provecho, porque lo que es en el Ayuntamiento sólo ha servido para llevarnos a la ruina, además de dejar la ciudad, como en su día dijo el Churri [José Pablo González] “que no la va a conocer ni la madre que la parió”. Y es verdad, a Collado Villalba ya no la conoce ni la madre que la parió.