www.elfarodelguadarrama.com

El alcalde de Collado Villalba y las fotos de la vergüenza: una situación insostenible

miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
Hace unos meses asistimos a la imagen de varios concejales socialistas y cargos de confianza del Ayuntamiento de Collado Villalba protagonizando un festín de ostras y cava tras asistir a la presentación de la candidatura de Trinidad Jiménez en el proceso de primarias del PSM. Esta semana, las imágenes -publicadas por el diario ABC y que también reproducimos en esta edición de El Faro del Guadarrama- han sido las del propio alcalde, José Pablo González, celebrando la Nochevieja de 2006 en compañía de dos conocidos empresarios de la localidad: uno, propietario de Cover, la empresa que resultó adjudicataria de la obra del túnel-parking de Honorio Lozano y Batalla de Bailén, la más cara en la historia de Collado Villalba; el otro, editor de ‘El Telégrafo’ (periódico local que defendió a ultranza el citado proyecto) y socio del primero en IGS, sociedad que ahora sabemos que comparte oficina en Las Rozas con Metro Cuadrado Global, la empresa que hace dos años promovió un sondeo -publicitado a bombo y platillo en el citado medio, como no podía ser de otra forma- del que salió la imperiosa necesidad de construir un centro comercial en la zona de la ITV, dándose la circunstancia de que el propio director general forma parte de la única mercantil que se presentó al concurso convocado por el Ayuntamiento. Esta y no otra es la realidad del Equipo de Gobierno de Villalba, sus relaciones con empresarios y las cenas en hoteles de lujo. Por eso, que el regidor diga que coincidió con ellos en Andorra por “casualidad” resulta un auténtico sarcasmo. En realidad es una coincidencia más que sumar a la la larga lista que hemos venido desvelando en las últimas semanas, en este caso en relación al concurso del centro comercial. Son ya demasiadas casualidades las que hacen que la situación de José Pablo González sea insostenible en el Consistorio villalbino. El Partido Socialista de Madrid, con Tomás Gómez a la cabeza, debe pronunciarse, del mismo modo que sus compañeros y los militantes socialistas deben dar la espalda a este tipo de actitudes si no quieren convertirse en cómplices. En caso de que no se vaya por voluntad propia, en una mínima demostración de dignidad, alguien debería forzar su marcha más pronto que tarde, porque José Pablo González está definitivamente tocado por los propios vicios de su gestión. No puede seguir ni un día más en este Ayuntamiento.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (4)    No(2)

+
0 comentarios