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JUNTO A LA COLONIA DEL PILAR SE HA INSTALADO HACE CASI UN AÑO UNA NAVE DE MANTENIMIENTO

Una estación de autobuses en el jardín

En la fotografía superior, vista de la nave situada a escasos metros de la vivienda de la denunciante; y en la inferior, algunos de los destrozos provocados por las vibraciones  (Foto: E. V.)
En la fotografía superior, vista de la nave situada a escasos metros de la vivienda de la denunciante; y en la inferior, algunos de los destrozos provocados por las vibraciones (Foto: E. V.)
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
Vibraciones, malos humos, ruidos… Oliva, una de las propietarias de un chalet en la Colonia del Pilar, afirma que vive como si tuviera una estación de autobuses en su jardín, ya que junto a la valla perimetral de su casa han instalado una nave industrial donde se procede a limpiar y reparar autobuses urbanos e interurbanos. Unas vibraciones producidas porque los vehículos permanecen más de 10 minutos en funcionamiento dentro de las citadas instalaciones, que se encuentran a escasos metros de las viviendas.

Esta misma semana, las vibraciones han sido tan fuertes que han provocado que se caigan los cuadros de las paredes y se rompan diversos objetos. Esta villalbina llamó ese mismo día a la Policía Local para poner en conocimiento esta situación; sin embargo, señala, “me dijeron que no iban a venir a levantar acta, ya que podía haber sido yo quien los hubiese tirado…. esto es kafkiano”.

No es la primera vez que denuncia esta situación. Ha remitido una decena de escritos al Ayuntamiento de Collado Villalba en los que además de las vibraciones, alerta de los intensos ruidos que sufre cada día. También ha enviado cartas a la Comunidad de Madrid en las que pone de manifiesto esta cuestión y otras, como que al parecer la nave todavía no tiene licencia de actividad y sin embargo llevan casi un año en funcionamiento.

Inaudito
“Es inaudito que se proteja esta Colonia en el Plan General y que dejen instalarse este tipo de industrias en los jardines de las casas”, señala esta vecina, quien explica que a día de hoy el Consistorio no les había informado acerca de este tema. En te sentido, cabe recordar que la Colonia del Pilar linda con el polígono P-5. La empresa compró una de las naves en 2007, pero no fue hasta julio del año pasado cuando la puso en funcionamiento a pleno rendimiento. “Llegamos de vacaciones -indica- y al salir al jardín era como si estuviésemos en una estación de autobuses”.

Desde entonces, Oliva no ha cesado en su afán de investigar si esta situación era legal o no. Según relata, en el Ayuntamiento le aseguraron que la empresa no tenía licencia de actividad. Esta villalbina asegura que la Colonia del Pilar está calificada como catalogada y protegida en el Plan General de Ordenación Urbana, añadiendo que este tipo de actividades sólo se podrían desarrollar a más de 2.000 metros de distancia. Y así se comunicó primero al concejal de Urbanismo, Juan José Morales, y más tarde al alcalde, José Pablo González, tras remitir numerosas cartas y reclamaciones sin recibir ninguna contestación.

Sólo en el interior
“Morales nos aseguró que en el proyecto presentado por la empresa para solicitar la actividad sólo trabajarían en el interior de la nave, y sin embargo los autobuses los reparaban en el retranqueo de la parcela, con los consiguientes ruidos y emisiones hacia nuestras viviendas”. Más tarde, después de pedir varias reuniones con el regidor, éste le recibió, “pero sin darme soluciones”.

Además, la denuncia no es sólo de esta vecina. Los propietarios de estos inmuebles aseguran que “a pesar de los escritos y reuniones con el Consistorio reclamando los derechos que tiene establecidos la Colonia para su conservación y preservación, no se están atendiendo tales denuncias y medidas solicitadas a este respecto”.

En una carta remitida a la Consejería de Medio Ambiente, indican que desde hace años estos vecinos han alertado acerca de esta situación, así como de la aplicación de nuevas ordenanzas en el polígono P-5, que el Ayuntamiento está desarrollando “en detrimento y calidad de vida de la Colonia del Pilar”. Lo único que quiere Oliva “es que antes de dar la licencia comprueben todo lo que hemos estado denunciando, si las naves cumplen todos los requisitos para albergar los autobuses salvaguardando la salud de los ciudadanos, y por supuesto si una actividad tan molesta como la que tiene lugar a escasos metros de mi jardín realmente se puede desarrollar”.
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