“Es un buen momento para estar juntos de forma más relajada”
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
Hay quien está deseando que llegue el momento y también quien prefiere pasar página cuanto antes, pero lo cierto es que las comidas de empresa ya se han convertido en una tradición más en las fechas previas a la celebración de la Navidad.Sandra, administrativa en una empresa ubicada en el Polígono P-29 de Collado Villalba, señala que en su empresa acuden la mayor parte de los empleados (unos 20). “En general creo que es un buen momento para hablar con los compañeros y estar juntos de forma más relajada, porque en el trabajo diario al final sólo hablamos de facturas y números. En nuestro caso la mayoría ya llevamos unos años trabajando aquí, pero conozco a gente que casi no sabe cómo se llaman sus compañeros hasta que llega este día, y al final descubres que ese tío que te caía tan mal en realidad es divertido y se puede pasar un buen rato con él”. Algo parecido opina Óscar, informático de El Escorial: “La verdad es que me da cierta pereza, pero al final siempre me lo paso bien. Nosotros hacemos cena, así que lo peligroso es desmadrarse, y yo soy bastante dado...”.
Impagable
Por supuesto, un clásico de las celebraciones es la ronda de chistes, además de los brindis, aunque sin duda el momento estrella para muchos de los empleados no es otro que ver a su jefe fuera del despacho, como uno más. “Sí, eso es impagable”, señalaba Laura, que trabaja en una oficina en Torrelodones. “Es un momento en el que te olvidas de los rangos y de quién manda o deja de mandar; un año hasta se quitó la corbata y empezó a agitarla en el aire, por no hablar de los bailes, porque nosotros montamos el sarao completo: comida, sobremesa y luego salimos un rato. Nos llevamos muy bien, así que no supone ningún esfuerzo, todo lo contrario”.
Poner buena cara
También hay quien piensa que lo de las comidas o cenas no es más que una pérdida de tiempo. “Yo paso de ir. Bastante estoy en el trabajo todos los días como para luego tener que poner buena cara y que me toque al lado de alguien a quien no soporto. Mejor me quedo en casa”, indicaba David, vecino de Collado Villalba que trabaja en una empresa de sistemas informáticos ubicada en Pozuelo. “Prefiero quedar algún día con la gente que me llevo bien, salimos por Madrid y nos ahorramos el tema de la comida”, añadía.
Sobre los establecimientos donde se celebran estas reuniones, hay opiniones para todos los gustos, desde quien prefiere sentarse alrededor de unas raciones hasta los que apuestan por una comida a todo trapo. “Un día es un día, ¿no? Y además, paga la empresa, así que...”, decía Laura. Otra cosa es que la crisis haya llegado a todos y en algunos sitios se haya optado por reducir el presupuesto destinado a esta celebración, o bien pagar a escote. “A mí no me importa; es decir, claro que prefiriría no tener que poner nada de mi bolsillo, pero es una oportunidad para estar con los compañeros, y me parece que es algo muy sano. Por lo menos brindaremos a ver si el próximo año la crisis ha pasado y llegan tiempos mejores, pero la comida no la perdonamos, eso seguro”. comentaba María, vecina de Galapagar, que trabaja como comercial en una empresa de Collado Villalba. En definitiva, que cualquier excusa es buena si hay algo que celebrar.