En la biblioteca nadie tira ‘El Faro’

En relación a la información aparecida en El Faro del Guadarrama el pasado 10 de julio, en la sección de Opinión con el título “La pugna entre poder y libertad”, le rogamos publique la siguiente rectificación:
No sabemos que clase de pesquisas habrán hecho ustedes para verter sobre la biblioteca municipal Miguel Hernández la grave acusación de que este centro secuestra el periódico El Faro. Lo único que podemos decir es que es absolutamente falso que alguien en la biblioteca se dedique a ‘secuestrar’ ningún periódico. Nadie en ningún momento por parte del periódico se ha puesto en contacto con nosotros para denunciar algún tipo de irregularidad o problema con los ejemplares que ustedes hace más de seis meses que no nos distribuyen (fecha aproximada, pues consultado a todo el personal no recuerdan ver El Faro en la biblioteca desde el verano pasado). Hemos pensado que había algún problema de reducción de la tirada de esta publicación.

Esta información, además de falsa, es absurda, pues le recuerdo que hay dos biblioteca en el municipio, la Miguel Hernández y la Sancho Panza. En esta última sí que nos distribuyen casi regularmente ejemplares, y puede comprobar que esta publicación se puede ver en sus estanterías de forma habitual. Por tanto, ¿no es absurdo dejar ejemplares en una y secuestrarlos en la otra?
En la biblioteca Miguel Hernández tenemos una media de 350 visitantes diarios por la mañana y 750 por la tarde, de los que un gran número de la mañana viene a recoger los periódicos gratuitos, llevándose varios en algún caso para sus negocios u otras personas. Por ello es comprensible que se agoten los ejemplares rápidamente, pero nunca en “cinco minutos” ni “misteriosamente”. Esto último es falso y calumnioso y poco digno, pues acusa a una institución con gran acogida entre los ciudadanos de secuestradores, censores, etc. y un número de epítetos graves de una manera velada, no sabemos si con la intención de ensuciar el nombre de este centro.

Exigimos, por tanto, una rectificación en la que se repare el daño causado a la imagen de la biblioteca y de sus trabajadores por la falsa acusación vertida en sus páginas. La calumnia también es un hecho perseguido por la ley, por lo que es recomendable que, antes de acusar de secuestrar la información a una institución como la B. M. Miguel Hernández, su periódico debería informarse mejor y averiguar los problemas de distribución y tirada de su publicación

JUAN CARLOS GONZÁLEZ GONZÁLEZ
Bibliotecario-jefe de las bibliotecas
municipales de Collado Villalba
Nota de la Dirección.- La próxima semana daremos cumplida información sobre este tema.