Isabel de Andrés se querella contra Manuel Cabrera

En ella se aprobaron, entre otros, proyectos para la construcción de más de 200 viviendas en Galapagar, lo que resultaba excesivo en la dinámica de dicho pueblo”. De estas actuaciones, señala De Andrés, “algunas se hicieron sin informe jurídico. Otras, como la de Fuente Elvira, se condicionaba a que el solicitante presentase justificante del pago de las tasas e impuestos municipales y que se iniciasen las obras de urbanización. La secretaría del Ayuntamiento también hizo constar que aún no se había aprobado por el pleno el convenio urbanístico”. De esta Comisión de Gobierno se ausentó voluntariamente la querellante, “a fin de no incurrir en posibles responsabilidades por la aparente ilegalidad del procedimiento que se estaba utilizando, sobre todo teniendo en cuenta que el gobierno municipal estaba en funciones en esos momentos”, según se explica en la demanda.

Antes incluso de este incidente sobre la citada licencia urbanística, Isabel Andrés asegura que ya comenzó a ser discriminada por parte de Cabrera, al no compartir algunas de sus decisiones políticas, principalmente por el desvío de dinero de una concejalía de la edil para lo que ella considera “gastos sorprendentes e innecesarios”, como la restauración de un monumento en Guinea Ecuatorial; o por negarse, ya estando en la oposición, a aceptar que el PP le diese 37.100 euros de sueldo anual a un concejal del PSOE, algo que finalmente no se ha llevado a cabo. Finalmente, De Andrés exigió que se sometiera votación la gestión de Manuel Cabrera entre 1999 y 2003.

Estas diferencias con los líderes del PSOE provocaron, según la denuncia, que la querellante “venga siendo sometida desde la anterior legislatura a todo tipo de presiones”, situación que asegura se ha “endurecido” desde hace casi dos años, “ejerciéndose todo tipo de coacciones y una presión psicológica tremenda y cruel por parte de su grupo político”. Como consecuencia, De Andrés indica que a finales de 2004 sufrió “un trastorno de ansiedad generalizado, que posteriormente pasó a convertirse en trastorno depresivo reactivo, precisando medicación específica y psicoterapia”.

Concejala no adscrita
Por otra parte, en el pleno celebrado el lunes se dio cuenta de la nueva composición del grupo socialista tras la expulsión de Isabel de Andrés, que ahora figura como concejala no adscrita. La portavoz del PSOE, Carmen Toledano, indicó que de esta manera se respetaba la decisión de su partido, después que en la sesión anterior el alcalde, José Luis González, dejase este punto en suspenso, a la espera de recibir un informe jurídico.