El CUC Villalba topa de nuevo contra el infortunio ante el Rayo B (1-2)

Apenas quedan consuelos para un CUC Villalba tan mejorado como infortunado, capaz de transformar en gol sólo una ínfima parte de las ocasiones que genera y de encajarlos de la forma más sui generis. Ante el Rayo Vallecano B, se repitió el guión, ya visto en Valdebebas ante el Real Madrid C, o en casa ante el Pegaso, o en el Cerro del Espino ante el Atlético C, con el resultado que todos saben a estas alturas: 1-2 y hundimiento histórico en la tabla de Tercera, con la permanencia a tiro de 10 puntos. El equipo de Fernando Sánchez, que ve la luz al final del túnel cada vez más cerca, no mereció tal castigo. Suyo fue el peso del partido, tuvo más balón y creó ocasiones de gol al principio y al final, antes de ir perdiendo y con el marcador adverso, incluso cuando todo estaba perdido con el 0-2 rayista. Cuajaron los amarillos un buen partido, pero nada parece suficiente cuando uno anda metido en el fango. Al minuto, un chutazo de Cifuentes se fue al exterior del palo; nada más empezar la segunda parte, tras un más o menos justo 0-0, entre el propio Cifuentes, Diego Aragoneses y De Loma dilapidaron en cuestión de diez minutos ocasiones clamorosas. Y con la afición manos en la nuca, llegó el mazazo de la manera más injusta, con una contra nacida en un claro fuera de juego que el juez de línea del ataque rayista no vio por mal colocación. Hasta tres franjirrojos pudieron partir en situación ilegal, y el que llevaba el balón, Manzano, culminó en gol tras una finalización plena de clase. El Villalba acusó el golpe hasta el punto de perder el control sobre el partido, incrédulo con el marcador. Cuando se quiso recuperar, y fue ya entrada la recta final, una polémica falta al borde del área sobre el omnipresente Manzano ya había supuesto el 0-2, en un tiro libre de Hugo por el palo del portero, mal tapado por Roberto. Faltaban 15 minutos y el Villalba apeló a la heroica. Los amarillos sólo pudieron encontrar el premio en el segundo de los cuatro minutos de descuento que aplicó Villoria Linacero, cuando Marcos definió con calidad un mano a mano con el cancerbero rayista. Apenas quedó tiempo para tirar un par de saques de esquina que hicieron soñar a la grada con un empate que, en cualquier caso, tampoco hubiese premiado a los amarillos. El Villalba crece, pero los resultados lo desmienten. Y contra la estadística suelen sobrar los demás argumentos.

CUC VILLALBA: Roberto; Cabrera, De Loma, Rubén, Dani; Marcos, Plaza, Raúl, Aragoneses; Cifuentes (Berni, 78’) y Ángel (Niko, 65’).

RAYO VALLECANO B: Juan Carlos; David Martín, Mario, Martínez, Jorge Casado; Comini (Jorge García, 66’), Rafa García, Diego (Arroyo, 59’), Manzano; Dani Provencio (Jorge Sáez, 68’) y Hugo.

GOLES: 0-1 Manzano (52’). 0-2 Hugo (74’). 1-2 Marcos (92’)

ÁRBITRO: Villoria Linacero (1). Irregular actuación con mal auxilio desde las bandas. Amonestó a los rayistas Hugo y Rafa García y expulsó por doble amarilla a Jorge García, también del Rayo B (85’).

INCIDENCIAS: Cerca de 200 espectadores en la Ciudad Deportiva de Collado Villalba en mañana fría y nublada. Varios de los socios más antiguos del club ocuparon el palco presidencial.