Retiran 2.000 kilos de basura en San Gregorio
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:13h
Cada cuatro o cinco meses, la Concejalía de Medio Ambiente se ve obligada a realizar labores de limpieza en algunas zonas, donde vecinos y camiones depositan restos de basura y escombros de manera incontrolada. Actualmente, Galapagar cuenta con tres puntos negros: junto al arroyo de San Gregorio, en la urbanización El Pocillo, que limita con Collado Villalba, y en una finca ubicada en la carretera del puerto.
La última de estas operaciones de limpieza se ha producido en el barrio de San Gregorio, donde los operarios municipales necesitaron el uso de una pequeña excavadora, una grúa y un camión pulpo para poder absorber todo el cúmulo de residuos que se agolpaban en el arroyo. Según explica la edil de Medio Ambiente, Elena Montoya, “regularmente hacemos labores de limpieza y en la última actuación hemos recogido alrededor de 2.000 kilos de basura; la mayoría son vertidos de los domicilios y de vecinos que saben que ahí se vierte y ellos también lo hacen. Sin embargo, ahora con la construcción de la variante parte del margen del río se ha tapado, por lo que pensamos que se va a dejar de depositar ahí basura”.
Además del problema estético que suponen estos vertidos, los vecinos se quejan de los olores y el consecuente riesgo de infecciones por la acumulación de basura, por ello desde el Ayuntamiento se ha hecho una campaña de concienciación dirigida a pedir la colaboración vecinal. “La campaña está hecha ya que en el resto del municipio han desaparecido los puntos de vertido, pero siempre hay algunas zonas en la que los ciudadanos no se conciencian como deberían y son más conflictivos”. Uno de estos enclaves es la urbanización El Pocillo, donde “la mayoría de los vertidos no proceden de Galapagar, también hay de Villalba, de camiones que van a depositar allí restos de las obras, pero lo intentamos limpiar también regularmente”, concluye Montoya.