Conclusiones evidentes

Tras el dictamen del Consejo de Estado sobre la obra de Honorio Lozano, son evidentes algunas conclusiones, entre ellas las que paso a detallar seguidamente: ha sido una obra mal planificada, poco útil y que no compensa lo perdido, porque nos hemos quedado sin un hermoso bulevar-paseo con grandes árboles, a cambio de un subterráneo que en el momento de escribir esta carta aún no está en uso (no debe ser urgente), por unas aceras anchas de granito llenas de obstáculos, desoladas y con árboles de maceta y por unas plazas de aparcamiento que están en fase de venta o alquiler, y por un endeudamiento del Ayuntamiento (mejor dicho, de todos los que residimos en este pueblo) muy cuantioso.

Pues aún así, parece que nuestro alcalde se sigue sintiendo orgulloso de lo que ha hecho.