José Tomás indulta a un toro en otra histórica tarde en la Monumental de Barcelona

Tras el homenaje en Galapagar, el triunfo en Salamanca y la buena faena realizada el viernes en Murcia, José Tomás despidió el domingo la temporada española con una nueva tarde para la historia en el coso de la Monumental de Barcelona.

Allí indultó a su segundo adversario, 'Idílico', un toro de la ganadería de Nuñez de Cuvillo, que ya desde su nombre llevaba escrito la bravura y transmisión, repitiendo una y otra vez ante los muletazos del de Galapagar, especialmente brillantes por la drerecha.
“Le he visto varias veces este año, y junto a la primera tarde en Madrid, ha sido la mejor faena de José Tomás”, explicaba en declaraciones a El Faro del Guadarrama un vecino de Galapagar que acudió el domingo a Barcelona, destacando también el gran final de temporada que ha realizado el diestro serrano.

Antes del colosal triunfo con “Idílico”, José Tomás ya había dado cuenta de su buen hacer ante su primer oponente, cortando un trofeo. El público pidió el segundo apéndice, pero finalmente la Presidencia no lo concedió.

Pero fue con el quinto de Núñez del Cubillo, que se empleó sin exceso en varas, cuando el de Galapagar bordó el toreo, con la complicidad de un animal repetidor hasta la extenuación. Pase tras pase, el toro humilló ante la muleta del de Galapagar, que fue levantando la temperatura en la plaza, acabando con la clamorosa petición del indulto, que finalmente fue concedida. Ni siquiera tuvieron que salir los cabestros para conducir al de Núñez del Cubillo de regreso a los chiqueros, puesto que unos pases de José Tomás sirvieron para que entrase acompañado por el aplauso unánime del público, puesto en pie para ovacionar a su torero predilecto, que cortó las dos orejas y el rabo simbólicos.