A 5 años de la tragedia del Yak-42, inauguran un monumento en conmemoración de los fallecidos

Los familiares de las víctimas, el Jefe de Estado Mayor de la Defensa, general Félix Sanz, y la subsecretaria de Defensa, María Victoria San José, rendirán homenaje en la Base Cid Campeador de Burgos a la memoria a los militares fallecidos el 26 de mayo de 2003 cuando el avión Yakolev-42 en el que volvían de una misión en Afganistán se estrelló en la localidad turca de Trebisonda. En el acto se inaugurará el primer monumento instalado en un recinto militar español a los 62 caídos.

A 5 años, la tragedia continúa impune, aunque las indagaciones sobre cómo se contrató el avión y por qué se identificaron erróneamente los cadáveres han entrado en su fase decisiva, después de que la sala de lo penal de la Audiencia Nacional ordenara reabrir la causa para seguir investigando.

Todo parece indicar que varios altos mandos militares de la época acabarán sentándose en el banquillo de los acusados, aunque con ellos no estará el ex ministro de Defensa Federico Trillo, acusado por los familiares de las víctimas de los delitos de imprudencia con resultado de muerte, malversación de caudales públicos y falsedad documental. Como Trillo es diputado del PP (y por tanto aforado), el juez que lleva adelante la causa, Grande-Marlaska, remitió al Tribunal Supremo el escrito de la acusación, pero cuando el Supremo le recordó que era él quien tenía que detallar qué indicios de criminalidad apreciaba en el ex ministro, el magistrado respondió que ninguno, por lo que el ex ministro no será imputado.

Los que sí serán acusados son el jefe del Estado Mayor de la Defensa, Antonio Moreno Barberá, y jefe del Estado Mayor Conjunto, Juan Luis Ibarreta. Además del contraalmirante José Antonio Martínez Sainz-Rozas; el coronel Joaquín Yáñez González y el comandante Alfonso Elías Lorenzo Taboada.

El Ministerio Público también acusará de falsedad documental por estos hechos al comandante médico José Ramírez y al capitán médico Miguel Saez.