Pese a una leve mejoría, la inflación no baja del 4%

Así, el IPC retoma los niveles en los que se encontraba en diciembre del año pasado, tras haber escalado hasta el 4,5% en marzo. No obstante, por sexto mes consecutivo, la inflación se mantuvo por encima del 4%, lejos del objetivo anual del 2%. En tanto, la inflación subyacente (que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados) se situó en el 3,1% en abril, tres décimas menos que en marzo.

El principal motido puede achacársele a la temporada de primavera-verano que encareció los precios en abril del vestido y el calzado casi dos dígitos, un 9,3%. Por su parte, vivienda y transporte subieron un 0,9% y un 0,5%, respectivamente. Por el contrario, ocio y cultura se abarataron un 1,1% al recoger la bajada de los paquetes turísticos, tras la finalización de la Semana Santa.

La leche continúa siendo el producto básico que más se encarece por enésimo mes. En tasa interanual, el precio de la leche se incrementó un 25,9%, seguido de los huevos, con subidas del 12,3%, y las frutas frescas, del 11,8%. La patata fue el único alimento que se abarató en un año, al caer un 11,1%. El azúcar mantuvo sus precios y la carne de porcino y el pescado fueron los que menos se encarecieron, con subidas del 1,3%.

En consecuencia, el ministro de Economía y vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, se ha mostrado cauto sobre la situación económica que vive España, pese al descenso del IPC anual en el mes de abril. Solbes ha asegurado que pese al descenso de tres décimas, "una inflación por encima del 4% es una mala inflación". Si bien "estamos un poquito mejor", esto no quiere decir "que estemos bien", sentenció el ministro.