Ya es hora que el tragamillas se lleve un reconocimiento de su tierra. yo de pequeño le recuerdo corriendo por toda villalba como un loco!! un tio muy simpatico
Pues me parece muy bien lo de Alberich, porque aunque estés en las antípodas de su ideología no se puede negar que siempre ha tenido pinta de persona honesta y honrada. Y eso en política cada vez menos.